El aceite de CBD combate el COVID Ofreciendo apoyo inmunitario y más

En los últimos años, el CBD ha obtenido un reconocimiento significativo por sus posibles beneficios terapéuticos. Se ha demostrado que el CBD ayuda con diversos dolores crónicos y síntomas de enfermedades graves, pero ¿podría ser esta molécula un nuevo contendiente para las enfermedades víricas?

Apasionantes investigaciones preliminares sugieren que el CBD combate el COVID ofreciendo apoyo inmunitario a través de sus propiedades antiinflamatorias, antimicrobianas y antivirales. Esta solución natural para estimular la inmunidad ofrece una nueva visión crítica sobre cómo podemos minimizar los síntomas y construir estrategias de cuidado preventivo más sólidas.

¿Qué hace que el CBD sea antiviral?

En el núcleo del potencial antiviral del CBD se encuentra su capacidad para modular el sistema inmunitario. El CBD interactúa con el sistema endocannabinoide (SCE), que desempeña un papel crucial en el mantenimiento del equilibrio de diversas funciones corporales. Esto incluye la respuesta inmunitaria.

Los estudios indican que el CBD tiene efectos inhibidores sobre la producción de citocinas en las células inmunitarias. Las citocinas son proteínas que median en la inflamación, y su producción excesiva puede provocar una inflamación perjudicial, como la «tormenta de citocinas» que se observa en los casos graves de COVID-19.

Los investigadores están entusiasmados con el potencial del CBD para reducir la inflamación, no sólo en infecciones víricas como la COVID-19, sino también en enfermedades autoinmunes y neurológicas. Aunque se necesita más investigación clínica, las primeras pruebas posicionan al CBD como un potente agente inmunomodulador.

Esto significa que puede tanto calmar las respuestas inmunitarias hiperactivas como proteger al organismo durante las infecciones víricas. La naturaleza polifacética del CBD sugiere que podría ser un elemento clave en futuras terapias inmunitarias.

Los consumidores de CBD muestran casos menos extremos de COVID-19

Un estudio de 2022 publicado por la Biblioteca Nacional de Medicina arroja luz sobre un hallazgo clave. Los consumidores de CBD experimentaron casos menos graves de COVID-19 en comparación con los no consumidores. Este análisis retrospectivo de casi 2.000 pacientes de COVID-19 en centros médicos del sur de California examinó diversos resultados sanitarios. Entre ellos, las tasas de ingreso en la UCI y la necesidad de ventilación mecánica.

Los resultados fueron prometedores. Los pacientes que consumían regularmente CBD, ya fuera mediante productos de cannabis o aceite de CBD, tuvieron menos desenlaces graves. Además, necesitaron menos cuidados intensivos que los que no consumieron estas sustancias. Esto sugiere que el CBD puede desempeñar un papel de apoyo para ayudar al sistema inmunitario a controlar los síntomas de la COVID-19. Aunque los investigadores advierten que se necesitan más estudios para validar estos hallazgos.

Las propiedades inmunomoduladoras del CBD, reconocidas desde hace tiempo en estudios sobre enfermedades autoinmunes e inflamación, parecen contribuir a estos resultados positivos. Este estudio abre la puerta a futuras investigaciones sobre el papel del CBD en las enfermedades víricas y la preparación ante pandemias.

El CBD mejora la actividad antiviral del sistema inmunitario

Más allá del CBD, se ha observado que los terpenos presentes en el aceite de CBD tienen beneficios antivirales adicionales. Son los compuestos aromáticos y calmantes que dan al CBD su sabor. Aún más fascinantes son sus efectos fisiológicos: los terpenos son los ingredientes especiales que confieren al aceite de CBD sus efectos específicos, como la relajación profunda o el aumento de energía.

Un estudio realizado por investigadores de Israel, publicado por los Institutos Nacionales de Salud, descubrió que el CBD mejora la actividad antiviral cuando se combina con terpenos. Cuando se combinaron terpenos con CBD, los efectos antivirales contra el coronavirus humano (HCoV-OC43) y la gripe A (H1N1) aumentaron significativamente.

El estudio demostró que los terpenos y el CBD actúan sinérgicamente para inhibir la producción de citoquinas proinflamatorias, lo que respalda aún más el papel del CBD como modulador del sistema inmunitario. Al reducir la inflamación y reforzar las defensas antivirales naturales del organismo, esta combinación podría ser una potente herramienta en la lucha contra el COVID-19 y otras infecciones víricas.

Según una investigación de la UCLA, los terpenos, combinados con el CBD, pueden actuar como barrera contra las infecciones víricas. Esto es especialmente valioso para poblaciones con acceso limitado a vacunas o medicamentos antivirales. Especialmente en los casos en que alguien está inmunodeprimido, el CBD puede ser una opción viable cuando la vacunación no lo es. El estudio descubrió que los terpenos presentaban efectos antiinflamatorios significativos, que se veían reforzados por la presencia de CBD.

Cómo influyen los terpenos en la inmunidad

Los terpenos no sólo hacen que las plantas huelan bien: desempeñan un papel fundamental en la defensa inmunitaria. Y la historia de los terpenos y los virus se remonta mucho más atrás que COVID. Ya en los siglos XIV y XV se preparaban mezclas de aceites esenciales para prevenir la infección de la peste. Se utilizaban aceites como el romero, el clavo, el limón y el eucalipto, que tienen perfiles terpénicos similares a los de las flores de cáñamo.

Hoy disponemos de pruebas modernas que respaldan el uso de estos asombrosos remedios naturales. En muchas plantas medicinales, los terpenos han demostrado propiedades antimicrobianas y antivirales. Por eso se han utilizado en la medicina tradicional durante siglos. En el cannabis o el cáñamo, estos compuestos pueden encontrarse en concentraciones variables según las distintas cepas. Ya sea solos o combinados con CBD, los terpenos ofrecen un mecanismo de defensa natural contra patógenos dañinos, incluidos virus como el COVID-19 y la gripe.

Los riesgos de fumar CBD y COVID

Aunque el CBD resulta prometedor en la lucha contra el COVID-19, hay que tener cuidado al fumar o vaporizar. Los productos de CBD inhalables, aunque ricos en cannabinoides, pueden exacerbar los problemas respiratorios. Recientemente se ha revelado que los consumidores de cannabis que fumaban o inhalaban corrían un mayor riesgo de padecer resultados graves del COVID-19. Estos pacientes tenían más probabilidades de requerir hospitalización o cuidados intensivos.

Se descubrió que los riesgos asociados a fumar cannabis o CBD eran similares a los de fumar tabaco. Aunque los consumidores de cannabis no tenían más probabilidades de morir de COVID-19, sí que sufrían un mayor estrés respiratorio. Para quienes deseen consumir CBD por sus efectos antivirales, se recomienda optar por formas comestibles, tintura o cápsulas, en lugar de fumar o vaporizar.

Reimaginar el bienestar con CBD

Para aprovechar los beneficios de apoyo inmunitario del CBD durante los brotes víricos, lo mejor es elegir productos ingeribles y abundantes en terpenos y cannabinoides. El aceite, las cápsulas y las tinturas de CBD son opciones excelentes para reforzar tu sistema inmunitario.

La capacidad del CBD para modular el sistema inmunitario, combinada con sus efectos antiinflamatorios y antivirales, ofrece esperanzas para un enfoque de la salud basado en las plantas. A medida que la investigación siga evolucionando, el CBD podría convertirse en una parte vital de nuestra estrategia para tratar infecciones víricas como la COVID-19. Tanto si buscas apoyo inmunitario como una forma de reducir el estrés en tiempos de incertidumbre, el CBD encierra un gran potencial de alivio físico y mental.